Buenos Aires, 5 de febrero de 2018

Hace pocos días el diario israelí Haaretz publicó una nota con el siguiente encabezamiento: «Israel comienza a emitir avisos de deportación a solicitantes de asilo africanos. La primera ronda de avisos, que otorga a los solicitantes de asilo de Eritrea y Sudán 60 días para partir, se emitirá a hombres sin hijos: alrededor de 200 mil personas».

No debería ser el Estado de Israel el que expulse de su territorio a personas que en sus países de origen –asolados por la miseria, el hambre, las persecuciones étnicas y religiosas, las guerras civiles– carecen de algún tipo de futuro.

La posición, ancestral, de los judíos en favor de los desválidos se ha ido desvirtuando en las últimas décadas en el mundo entero. Salvo ciertos casos humanitarios individuales, Israel está entre los que actúan en esa dirección. Solo basta con ver cómo decide habitualmente su voto en las Naciones Unidas.

La Federación de Entidades Culturales Judías de la Argentina – Idisher Cultur Farband (ICUF Argentina) insta a los gobernantes israelíes a rever la medida y expresa su más decidido apoyo a las organizaciones sociales y políticas que han condenado este tipo de resoluciones.

Marcelo Horestein, Presidente

Isaac Rapaport, Secretario General